jueves, 30 de diciembre de 2010

DAMANHUR Y LOS TEMPLOS DE LA HUMANIDAD


Damanhur es una comunidad ubicada al norte de Italia, en el Valle de Valschiusella cerca de la ciudad de Torino. Creada hace 35 años bajo el impulso de Oberto Araudi, mejor conocido como Falco o Halcón , es hoy en día una Federación de Comunidades con más de 800 habitantes.
A nuestra llegada, Hormiga la que ahora es una gran amiga, nos llevó a dar una paseo por el centro social de Damanhur para conocer sus principales espacios y actividades. Lo primero que conocimos fue el Templo al aire libre en el cual se celebran fiestas especiales como los solsticios, equinoccios, el oráculo o el día de muertos. Luego nos dirigimos al círculo de piedras y a las espirales y laberintos dibujados en el suelo “Aquí puede venir a meditar mientras caminan y sienten la energía del lugar, pues Damanhur está construida sobre la confluencia de las líneas sincrónicas de la tierra, es decir las venas energéticas de nuestro planeta que lo conectan vertical y horizontalmente entre sí y con el resto de la galaxia” nos explica Hormiga. Nos quedamos con ganas de empezar las meditaciones, pero había que seguir la visita.
¿Qué significa Damanhur? le preguntamos “Ciudad de Luz, es un antiguo nombre egipcio” nos responde Formica mientras nos acercamos a Olami, la Universidad de Damanhur “Aquí se encuentra la Escuela de Misterios y la Escuela para Sanadores con tres años de estudios para los que quieran integrarse al programa”. Con Emiliano nos quedamos impactados al saber que existe la posibilidad de tener estudios reconocidos hacia este tipo de saberes. Hormiga se despide de nosotros y nos grita desde lejos “Y lo mejor todavía no lo han visto”.
A la mañana siguiente Macaco nos espera para continuar la visita. Nos sube a su auto y nos lleva colina arriba. “Hoy van a ver el resultado de 15 años de trabajo silencioso por parte de todos los habitantes de Damanhur” nos dice Macaco. Llegamos a una casa cualquiera donde una señora nos abre una puerta que pareciera llevarnos dentro la casa, pero no, es la entrada a los Templos de la Humanidad.
Túneles estrechos llenos de símbolos y escrituras antiguas y de diversas culturas nos conducen a un espacio más grande. Entre tanto, Macaco nos cuenta la historia de este lugar. “Damanhur nace con el objetivo de ser un modelo para la humanidad, donde la vida en comunidad, el respeto a la naturaleza y el trabajo espiritual sean parte del trabajo diario. Con esta misión en mente, los primeros habitantes bajo la guía de Falco, comenzaron esta ardua pero magnífica tarea, crear Templos para la Humanidad bajo la tierra. Nadie tenía ninguna experiencia en construcciones y no había dinero para empezar, pero Falco tenía un plan completo en la cabeza que convenció a todos sin ninguna dificultad. De esta manera, toda las noches durante cinco años, se cavó en la roca sólida del valle piemontes sacando 5.000 baldes de tierra diariamente. El trabajo se hacía silenciosamente, tan solo con palas y picotas, pues nadie podía enterarse de esta obra, ya que no existían las regulaciones para hacerlo y la iglesia católica habría detenido la obra inmediatamente” nos comenta Macaco.
Llegamos al primero de 6 salones que habríamos de visitar. El primero fue el Salón dedicado al Agua. El siguiente dedicado a la Tierra, seguido del Salón de los Espejos y el Templo Azul. Posteriormente se encuentra el Laberinto y el Hall de las Esferas. Son indescriptibles las dos horas de paseo que estuvimos dentro de los Templos, donde el trabajo de excavación, el decorado de cada uno de los espacios y el mensaje que cada Salón tiene para darnos, nos dejaron totalmente impactados.
“El objetivo fue crear un espacio para despertar la Divinidad en cada ser humano, donde uno se pueda conectar con su esencia divina y con la esencia divina de nuestro planeta y del cosmos. Que a la vez sea un espacio donde toda la gente pueda encontrarse sin distinción de raza ni religión, y que sirva a futuras generaciones como una gran Librería viva del Conocimiento Humano” nos revela Macaco.
Nos sorprende que una comunidad tan grande como es Damanhur tenga entre sus principales búsquedas y fortalezas, el trabajo espiritual, que es según Anaconda “lo que permite que la comunidad avance, funcione y se mantenga unida”. “No somos una secta ni tenemos una religión. A través de profundas meditaciones buscamos volver a lo esencial que es aquello que hemos olvidado, nuestra divinidad” añade Anaconda.

Brújula
Para mayor información sobre Damanhur visitar www.damanhur.org. Para los interesados en ser nuevos ciudadanos escribir a newlife@damanhur.it

sábado, 18 de diciembre de 2010

DAMANHUR Federación de Comunidades y un Centro Internacional para el desarrollo espiritual, artístico y social


Cuando insistimos en visitar Damanhur, nunca supimos lo que nos íbamos a encontrar. El viaje comenzó cuando una pareja de buenos nuevos amigos decidió llevarnos, lo cual fue un alivio, ya que llegar a este lugar hubiese sido muy difícil sin su ayuda. Ubicado al Norte de Italia, a 30 Km. de Torino en el corazón del Valle de Valchiusella, se encuentra Damanhur, un proyecto que inicialmente nació como un sueño individual hace más de 30 años, que poco a poco se convirtió en un sueño común, que hoy alberga a más de 800 personas.
El sueño era poder construir una sociedad basada en el optimismo y la idea de que el ser humano podía ser el creador de su propio destino. Donde la gente podía vivir en una evolucionada comunidad que disfrutara de una magnífica existencia para la cual todos trabajarán por el bien común. Actualmente Damanhur es más que una comunidad, es una Federación de Comunidades y un Centro Internacional para el desarrollo espiritual, artístico y social en un territorio que comprende bosques, granjas, talleres y Templos para la Humanidad.
La Federación está compuesta por lo que ellos denominan los cuatro cuerpos de Damanhur, cada uno de los cuales se focaliza en un aspecto particular de la experiencia humana. La Escuela de Meditación (de tradición ritual), el cuerpo Social (la teoría es puesta en práctica), el Juego de la Vida (dinámicas y experimentación de la vida como un juego) y el Tecnarcato (el crecimiento interior individual).
Cada uno de los ciudadanos participa activamente de una de éstas áreas siguiendo su propia inclinación o vocación. Así tenemos a los que siguen el Camino del Oráculo, de los Monjes, de los Guerreros, de los Sanadores, de la Palabra o el Camino de las Artes Integradas. Dependiendo la inclinación personal se conforman los núcleos de viviendas donde habitan alrededor de 20 personas entre adultos y niños.
El núcleo donde nos hospedamos era Tiglio, llamado así por el enorme árbol de Tilo que resguardaba el lugar. Este núcleo está organizado alrededor de la educación, pues todos sus habitantes trabajan en las escuelas de Damanhur, ya sea como profesores, tutores o planificadores de la pedagogía Damanhuriana. Pero también existe el núcleo llamado Gorila, donde se desarrollan y experimentan todos los sistemas tecnológicos de energía alternativa. El núcleo Puerta del Sol, uno de los más antiguos, es el que se ocupa de mantener los Templos y guiar a la gente que los visita. Otro núcleo, Aval, es el encargado de la producción de vino y caracterizado por ser ambientalmente sostenible por su infraestructura ecológica, el reciclado de la basura, la utilización de energías alternativas y una dieta libre de alimentos transgénicos. Así cada núcleo va cumpliendo un rol específico que complementa al trabajo del resto para formar una Federación organizada y ejemplar. “En cada núcleo existe un responsable que lo representa y cada persona que lo habita tiene un rol que cumplir dentro de la comunidad así como cada comunidad tiene un rol que cumplir dentro de la Federación. De esta manera se aporta con algo y a la vez recibe otra” nos comenta Macaco Tamarindo, como se hacen llamar todos los damanhurianos con nombres de animales y plantas.
Sin embargo, hablando con la gente de Damanhur, todos cuentan que la vida en comunidad es de las cosas más complicadas con las que lidiar cotidianamente, pero que existen algunas recetas que ellos mismos han experimentado y aplicado y que aseguran, pueden dar buenos resultados. Estas son: amabilidad, espacio personal, espacios comunales amplios, compartir el talento personal, abrirse al cambio personal, compartir tareas, cumplir con las labores encomendadas, espiritualidad grupal y buen humor, compartir momentos de reunión, elecciones anuales para rotar las cabezas de grupo, determinar un objetivo común y compartir los gastos.
Claramente éstas nos son reglas, pues en ningún núcleo sentimos que exista ningún tipo de presión o castigo por cumplirlas. La vida en comunidad es parte de uno de los muchos proyectos y experimentos que el gran Laboratorio para el Futuro que es Damanhur, busca ejemplificar al mundo, pues están seguros que una nueva sociedad más justa, más ecológica y más espiritual, debe nacer en comunidad.
Y este proyecto continuará….
Brújula
Para mayor información sobre Damanhur visitar www.damanhur.org. Para los interesados en ser nuevos ciudadanos escribir a newlife@damanhur.it

sábado, 4 de diciembre de 2010

CAPITULO 13: Los hijos del fin dl mundo

TORRE PELLICE EL LABORATORIO EXPERIMENTAL Y LA BANCA DEL TIEMPO


Al norte de Italia se encuentra la región de Piemonte, un lugar privilegiado por la riqueza natural que lo rodea, desde bosques de altos pinos hasta árboles de menor tamaño que en el otoño salpican el valle en tonos rojos, amarillos y ocres. Cruzando el bosque llegamos a Torre Pellice en Luserna San Giovanni, donde se encuentra el Laboratorio Experimental de Villa Holanda y Casa Gaia, un proyecto que a diferencia del resto de iniciativas que visitamos, se encuentra en su fase de inicio, lo cual nos pareció muy interesante porque habría mucho que aprender.
Giovanni y su compañera nos reciben calurosamente en el nuevo espacio que han construido para la Recepción de Huéspedes y que nosotros tendremos el privilegio de inaugurar. Mientras nos van contando todos los proyectos que quieren conseguir y van mostrándonos el lugar, hay tres aspectos que nos parecen muy relevantes: la idea de que este espacio sea un campo de prueba o un laboratorio, la idea de no basarse en el dinero como moneda de cambio y las nuevas tecnologías que se están implementando para reducir el impacto medioambiental.
¿Por qué llaman a este proyecto Laboratorio? preguntamos a Giovanni. “Lo llamamos Laboratorio porque queremos ser un campo de prueba y experimentación tanto a nivel social, medioambiental y tecnológico” nos dice el encargado de Casa Gaia. “El objetivo es el diseño e implementación de un ecosistema replicable a cualquier escala, donde las familias optan por vivir y trabajar juntos sobre nuevas relaciones económicas y con la tecnología apropiada para poder demostrar que existen soluciones compartidas para disfrutar de una nueva economía y de una nueva forma de vida más ambiental” añade.
Casa Gaia es un prototipo de construcción que usa todo tipo de tecnologías y conocimientos para reducir el impacto medioambiental. Es así como a partir de una construcción del 1600, se remodeló un espacio para poder re-habitarlo y reciclar todos los materiales que ya existían sustituyendo sólo algunos para conseguir mejores sistemas de aislamiento térmico como la fibra de leño en las paredes, paneles fotovoltaicos para el calentamiento del agua y la producción de energía eléctrica, entre otros, consiguiendo así la autonomía del lugar desde el punto de vista energético.
Otro de los puntos que nos interesó mucho es la manera en cómo están buscando cambiar el sistema económico, del monetario al temporal. “Concebir una nueva economía, que se llama Economía Relacional , significa que uno no se basa en cuánto cuesta el trabajo y en cuánto te lo pago, sino en la relación que construimos entre unos y otros, a pesar de que todavía no se puede dejar de pensar en el dinero que se usa para hacer funcionar un proyecto, pero con el espíritu del intercambio” nos explica Giovanni.
La Economía Relacional no es un invento de este proyecto, aunque es de los pocos que la ponen en práctica, es una iniciativa creada hace varios años sobre la idea de un Banco del Tiempo.
Un Banco de Tiempo es un sistema de intercambio de servicios por tiempo. En él la unidad de intercambio no es el dinero habitual sino una medida de tiempo, por ejemplo el trabajo por hora. “Se llama Banca del Tiempo porque por ejemplo, yo que soy un pensionado y que tengo experiencia, doy mi tiempo y mi conocimiento a otros sin tener un retorno económico, y después los otros me ayudan con la misma cantidad de tiempo y según su propia habilidad o experiencia.” nos dice el responsable de Casa Gaia.
Concebir un nuevo tipo de economía relacional al tiempo y no al dinero nos parece algo sumamente innovador y replicable, ya que es un sistema de intercambio de servicios por servicios o favores por favores y propone la ventaja de fomentar las relaciones sociales y la igualdad entre distintos estratos económicos. Y lo más lindo será ver crecer este proyecto y saber cuáles son las fallas con las que se encuentran en el camino y cuáles son los logros más importantes que tengan.
Brújula
El dinero de tiempo se crea a través de crédito mutuo: cada transacción se registra como un crédito y débito en las cuentas de los participantes. En un sistema de dinero de tiempo, o banco de tiempo, el tiempo de cada participante se valora por igual. El dinero de tiempo reconoce y alienta un servicio recíproco a la comunidad y permite el comercio y la cooperación entre los participantes. Más importante aún, el banco de tiempo es una herramienta para revitalizar la vida misma de la comunidad.